Donostia: 8,96 Calidad-precio: 6,91

La nota más alta la obtiene la pregunta «Globalmente, ¿como califica su visita a San Sebastián?», en la tabla de quienes acudieron a la ciudad durante la temporada media o baja. Nada menos que un 8,96, un poco por encima de la nota media global en este mismo aspecto, que es de 8,89.

La calificación más baja, con diferencia respecto al resto de los aspectos, es la que obtiene la pregunta sobre la relación entre calidad y precio. Es la única que no llega al notable. Es verdad que se queda cerca, con ese 6,91 que es el mismo para las dos temporadas turísticas.

La seguridad, la conservación del entorno, los alojamientos y la gastronomía o el transporte público obtienen las mejores notas, por encima de la oferta comercial, los accesos a la ciudad y la señalización.

El concejal de Turismo, Ernesto Gasco, destaca del informe que las notas son altas, que incluso la más baja, la que califica la relación calidad-precio, es elevada y que se demuestra que la ciudad es un valor por sí misma. «La calidad del paisaje, el equilibrio del desarrollo urbano y buenos servicios son cosas que nos definen y que se valoran por parte de quienes nos visitan. Vamos por el buen camino».

Desde el mes que viene

«Soy James, de Australia. Me gusta Gipuzkoa porque es muy calentita y muy 'buenita'», dice una de las dedicatorias que aparecen en el libro que está colocado en la oficina de información que ha abierto el departamento de Turismo de la Diputación de Gipuzkoa en el Boulevard de San Sebastián. La oficina ha abierto sus puertas este mismo año y todavía no ha puesto en marcha un cuestionario protocolario en el que los turistas y visitantes puedan contestar a preguntas vinculadas a su grado de satisfacción con el destino.

Cristina, responsable de este lugar, que se encuentra puerta con puerta con la oficina del Ayuntamiento de Donostia, confía en que el 1 de septiembre el cuestionario esté listo, aunque todavía va a ser necesario precisar el sistema que se va a implantar.

«Sin embargo el libro, aunque menos científico, sí es más espontáneo, la gente se anima más a responder que si les das un papel oficial en el que contestar». Poco le costó a «una menorquina enamorada de la ciudad» escribir esta sensación en una de las páginas, ni tampoco a una pareja de nombres ininteligibles, aunque de expresa nacionalidad uruguaya prometer que volverán. «I love San Sebastián», firma la familia El Kuhataki formada por Salala, Ihsassan, Mohameh et Anas, que llegaron a pasar sus vacaciones desde Marruecos y se han encontrado «con una ciudad muy bella».

«La gente escribe en general cosas bonitas, dice lo bien que lo ha pasado en la ciudad, pese a que pueden poner lo que quieran». Un insulto más que grosero para la Real Sociedad y una firma que se identifica con Lleida y muestra su decepción por lo que ha visto en la ciudad son los comentarios más negativos que pueden verse en el libro.

Y aunque cuentan con su encuesta sistematizada que se actualiza año tras año, la Oficina de Turismo de San Sebastián también tiene esa especie de libro de visitas en el que cada uno escribe sus sensaciones, sus adioses o sus ganas de volver.

«Wow! Wow! Wow!» escriben Anik, Nicole y Francis, llegados desde la ciudad canadiense de Quebec. Un argentino se entusiasma hasta el punto de asegurar que «viviría aquí», no faltan los entusiastas de la gastronomía, como Ismael de Cuéllar, deseando ir a por todos los pintxos o un par de amigas que no ponen sus nombres pero que alaban la comida y se muestran dispuestas, incluso, a engordar con tal de probarlo todo. «Preciosa ciudad y gente encantadora», rubrican Lluis y Cris, que llegaron desde Valencia dispuestos a conocerlo todo.